A fines de enero, y mientras buena parte de la atención mediática se centraba en el tricampeonato de la UC y la agonía que vivía Colo Colo, con menos ruido pero alta dosis de rendimiento Palestino se daba maña para clasificar a la Copa Sudamericana gracias a una notable campaña en la segunda rueda del campeonato nacional. En ese momento el elenco dirigido por José Luis Sierra era una de las sensaciones del fútbol chileno y con grandes proyecciones de aspirar a cosas importantes en 2021, sin embargo, en espacio de solo un semestre esas ilusiones han chocado ante una dura realidad, tan dura que hoy el club tetracolor está ante la necesidad de buscar nuevo técnico luego de la desvinculación del ‘Coto’, quien acaba de dejar la tienda árabe con un magro saldo de 17 puntos en 15 partidos disputados que tiene al equipo de La Cisterna situado en un preocupante décimo cuarto lugar de la tabla de posiciones de Primera A, solo 1 punto por delante de Curicó que está en zona de promoción.
¿Qué sucedió para que el cuadro sensación de fines de 2020 e inicios de 2021 bajara tanto su rendimiento en los últimos meses? En MPRO Gol ofrecemos algunas teorías.

Palestino mostró una de sus mejores versiones del año derrotando a Colo Colo en Macul.
Peso de las expectativas
Quiérase o no, cada vez que un equipo de media tabla es tildado como candidato al título o a pelear lugares de vanguardia en determinado torneo, los resultados suelen estar por debajo de lo esperado. Ese es el caso de Palestino, que pese a mantener una buena base del plantel que causó sensación en el torneo 2020, no ha podido replicar su rendimiento en la presente temporada, un hecho que tiene obviamente una consideración deportiva pero también mental, y es que una cosa es picar desde atrás y otra muy distinta es manejar la presión de estar adelante y saberse con la responsabilidad de luchar en la cima del ranking. Palestino no ha logrado sortear ese desafío, y ahora una vez más se ve ante la obligación de remontar desde atrás para evitar zozobras en lo que resta de 2021.
Alto promedio de edad
Si algo cabe destacar en el cuadro de Palestino es la calidad de sus jugadores. Nadie puede cuestionar que el conjunto de La Cisterna es uno de los mejores a la hora de tratar el balón, partiendo por las genialidades de Luis Jiménez y Carlos Villanueva, sin embargo, el promedio de edad de su plantel, con más de 10 jugadores por sobre los 30 años, le juegan en contra a la hora de mantener un nivel alto durante los 90 minutos de juego. Eso se evidenció con nitidez en la Copa Sudamericana y ha vuelto a quedar claro en el torneo nacional, sobre todo en los segundos 45 minutos donde en más de una ocasión ha perdido encuentros que parecían dominados.
Escasos cambios de ritmo
El hecho de tener un plantel con un alto promedio de edad suele generar complicaciones en lo que respecta a la intensidad de juego, un aspecto en el que Palestino está claramente al debe, puesto que los de Colonia, pese a manejar muy bien el balón, carecen de cambios de velocidad que provoquen sorpresas y desorden en las defensas rivales. Por lo general los árabes, con excepción de los explosivos arranques del joven Bruno Barticciotto, exhiben un ritmo muy cansino que los termina por convertir en un equipo muy predecible y con espacio poder de reacción, salvo casos excepcionales como se dio cuando derrotaron a Colo Colo en el estadio Monumental remontando un 0-1 en el marcador.
Incapacidad para manejar resultados
Pese al factor edad y la carencia de intensidad en el campo de juego, cabe reconocer que Palestino podría estar fácilmente en zona de clasificación a copas internacionales de no ser por su fragilidad para mantener resultados positivos. El club de Colonia ha dominado las acciones varios partidos, pero por uno u otro motivo ha cedido puntos que parecían ganados como le sucedió en las últimas semanas ante La Serena, La Calera y Curicó Unido.
Fragilidad defensiva
A nivel de juego Palestino luce sus mejores armas y variantes en el mediocampo con el accionar de César Cortés, Agustín Farías, Carlos Villanueva, Brayan Carrasco y Misael Dávila, sin embargo, esa prolijidad ha quedado relegada a un segundo plano en este 2021 a partir de las severas licencias que ha presentado el sector defensivo de su oncena, y es que tanto en la Copa Sudamericana como el torneo nacional los números de Palestino en esa faceta son muy adversos, con un promedio de sobre 1,5 goles recibidos por partido. En cuanto a nombres los de Colonia tienen buenos nombres en la zaga con Vicente Fernández, Bruno Romo, Pablo Alvarado y Cristian Suárez, sin embargo, el potencial individual no se ha traducido en un andar colectivo sólido que otorgue garantías en la defensa palestinista.
Al tenor de los aspectos mencionados está claro que el próximo DT de Palestino deberá trabajar duro para limar las deficiencias demostradas en la primera mitad de campeonato nacional, pero los hinchas árabes tienen razones para mantener una importante dosis de confianza, y es que pocos cuadros del torneo chileno disponen de una riqueza técnica tan generosa como el que del club con sede en La Cisterna. Será asunto de amoldar las piezas, recobrar confianza y devolver el espíritu ganador a un cuadro que no por nada se consagró como el segundo mejor de la rueda final de 2020.